Plan de empresa con plantilla: un documento imprescindible para el éxito

09/09/2021 | Santander Universidades

¿Sabías que el 20% de los proyectos de emprendimiento desaparecen durante el primer año y solo tres de cada diez siguen activos después de una década? Esto es lo que señalan los datos de Small Business Administration. 

La ausencia de un plan de negocio es una de las principales causas del fracaso emprendedor, junto a los obstáculos financieros y la falta de preparación de los promotores. Pero, ¿cómo evitarlo? Conoce cuál es la estructura de un plan de empresa y accede a plantillas que te ayuden a elaborarlo de forma rápida y sencilla. Te lo explicamos todo.

¿Por qué necesitas un plan de empresa?

El plan de empresa es un documento en el que se describe de forma resumida el proyecto empresarial, se detallan los objetivos que se persiguen a corto, medio y largo plazo y se expone cómo se van a alcanzar estas metas.

Ahora bien, no es un simple dossier. Lo cierto es que su papel resulta esencial para lograr el éxito de cualquier negocio porque:

  • Actúa como hoja de ruta tanto para la puesta en marcha como para el desarrollo de la compañía. 
  • Contribuye a plantear la idea de negocio y establecer un orden de prioridad de los objetivos. 
  • Desvela cuáles son las fortalezas y debilidades de la empresa, de manera que posibilita la concreción de las líneas estratégicas.  
  • Facilita la toma de decisiones. 
  • Permite conocer el sector y la competencia.
  • Ayuda a reconducir los objetivos y procedimientos para adaptarlos a las circunstancias. 
  • Proporciona un estudio de la viabilidad económica y operativa del negocio. 
  • Sirve como carta de presentación para solicitar financiación o conseguir clientes.

¿Qué debe incluir un plan de negocios?

Aunque no hay un modelo estándar, a la hora de redactar tu propio plan de empresa, es importante que se aborden los siguientes aspectos

1. Resumen Ejecutivo

Las primeras páginas de una buena plantilla de un plan de empresa incluyen un espacio para el resumen ejecutivo que, como su propio nombre indica, consiste en una exposición de los puntos más importantes que después se ampliarán en el documento. De ahí que, aunque abra el dossier, sea recomendable redactarlo al final, cuando el resto de puntos estén bien definidos. 

El objetivo de esta sección es presentar la propuesta de la compañía de forma breve y concisa; es decir, debes argumentar quién eres y por qué tu proyecto es interesante. Se trata de vender tu idea, como un elevator speech, pero en versión escrita. 

2. Descripción del proyecto

En un plan de negocio lo primero que se debe añadir es una presentación para que te puedan conocer mejor: quién es tu empresa, a qué se dedica, qué persigue, qué ventajas competitivas tiene en el mercado, etc.

En este sentido, es importante incluir aspectos como la cartera de productos y servicios, la ubicación, las instalaciones y otros activos relevantes como, por ejemplo, patentes. Asimismo, debe figurar tu público objetivo, la forma jurídica adoptada o la historia de la compañía. Por supuesto, no te olvides de explicar cuál es la misión, visión y valores del negocio, subrayando los beneficios que va a aportar el proyecto a la sociedad.  

3. Descripción de los promotores

Tras presentar la empresa, llega el momento de hablar sobre las personas responsables de la idea. Aporta información sobre su experiencia personal y profesional, su cualificación laboral, sus fortalezas, sus motivaciones y objetivos. Se trata de que los stakeholders puedan “poner cara” a la compañía. 

4. Análisis del mercado

Una vez finalizadas todas las presentaciones, llega el momento de profundizar en los aspectos técnicos del proyecto. Por esta razón, cuando elabores el plan de empresa, con o sin la ayuda de una plantilla, debes incorporar un análisis del mercado que permita evidenciar la oportunidad de negocio. Para ello, puedes utilizar la matriz DAFO, con la que podrás evaluar las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades que presenta la iniciativa empresarial en el plano interno y externo. 

5. Estructura organizativa

Expuesto el quién, el qué y el porqué, continúa ahondando en el cómo. En primer lugar, haz una referencia a la estructura organizativa de la empresa. En concreto, deberías mencionar aspectos como el organigrama de la compañía, la política de contratación, los planes de promoción y capacitación y la cultura organizacional. 

6. Plan de operaciones

¿Cómo vas a comercializar tu idea de negocio? Esta cuestión es la que tienes que responder en esta sección del plan de empresa, es decir, detalla cómo vas a conseguir que esta oportunidad de negocio que has detectado se convierta en una realidad rentable. Por este motivo, es fundamental establecer en este mismo documento los objetivos SMART de la compañía y las líneas estratégicas a seguir para alcanzarlos. 

7. Plan de marketing

Toda plantilla de un plan de empresa estaría incompleta sin un apartado específico en el que se plantee la estrategia comercial.

Tendrás que contar con un plan de marketing en el que analices las líneas de actuación de forma mucho más pormenorizada, donde se incluyan los puntos más relevantes del plan de negocio: la definición del buyer persona o del marketing mix, así como la fijación de los principales objetivos y estrategias y los canales de difusión que se usarán. 

8. Plan económico y financiero

Además de disponer de un plan económico y financiero con todos los detalles de la viabilidad económica de la idea, en un plan de empresa deben constar los principales datos sobre la previsión de ingresos y gastos, la inversión inicial, la disponibilidad de capital, las fuentes de financiación o las necesidades de ingresos. Para amenizar la lectura y facilitar la comprensión, es aconsejable usar gráficos y tablas para presentar las cifras.  

9. Calendario de actuaciones

Por último, no te olvides de calendarizar todo el proceso y concretar cuándo esperas conseguir los diferentes objetivos. Ten en cuenta, por ejemplo, que si estás buscando financiación, al inversor le interesa saber cuándo va a recuperar su capital, ya que se trata de un factor que determinará si apoya o no económicamente al proyecto. 

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¿Cómo elaborar un plan de negocios para una empresa?

No solo es esencial que se traten todos los puntos en el documento, sino que también debes tener en cuenta las siguientes pautas para su redacción

  • Sé genuino: aunque puedas elaborar un plan de empresa a partir de una plantilla o de un ejemplo existente, no se debe copiar toda la información. Estos recursos solo deben servirte de guía para plantear tu proyecto de manera personalizada. 
  • Plasma un enfoque realista: el plan de negocio debe dar una buena impresión sobre la idea, pero sin caer en un exceso de optimismo en cuanto a las posibilidades de éxito del negocio. Por ello, procura recoger los objetivos y las previsiones con realismo y sustentados en datos fehacientes. 
  • Adáptalo al público objetivo: no es lo mismo presentar el plan de empresa a un cliente potencial que a un banco para solicitar financiación. Por ejemplo, si te diriges a un inversor, deberás incidir en la rentabilidad de la idea, en cómo se va a recuperar el dinero, mientras que si solicitas una subvención pública, la administración valorará otros aspectos, como la creación de empleo y el impacto social del proyecto. 
  • Actualízalo de forma constante: el plan de negocio es un documento que debe revisarse de forma permanente, ya que hay que ajustarlo a las nuevas circunstancias que puedan surgir.
  • Haz atractiva la presentación del proyecto: no desaproveches el poder de la imagen. Si quieres conseguir que esta carta de presentación llame la atención del destinatario, cuida el diseño. En este sentido, utiliza recursos gráficos para presentar la información, plantea una línea argumental y no te extiendas más de lo debido: unos 15 o 20 folios deberían ser suficientes.  

¿Dónde encontrar una plantilla para tu plan de empresa?

¿Miedo al papel en blanco? Si no quieres empezar de cero el plan de negocio, una plantilla es una buena solución. Lo cierto es que puedes acceder a ellas por varias vías:

  • Plataformas de emprendimiento: en Internet hay numerosas páginas web especializadas en el sector emprendedor que facilitan plantillas de planes de empresa, gratuitas y de pago, listas para descargar. Algunos ejemplos son Infoautónomos, 100plandenegocio o Plandenegocio

  • Aplicaciones móviles: si sueles trabajar con tu smartphone, también puedes encontrar aplicaciones en Android e iOs para diseñar tu plan de negocio, como Enloop, eBusinessplan o Bizplan

  • Organismos públicos: hay muchas instituciones oficiales que facilitan plantillas de planes de negocios, ya sean entidades públicas, asociaciones de empresarios, universidades, fundaciones dirigidas a la actividad empresarial, etc. Por ejemplo, este es el caso de la Dirección General de Política de la PYME del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, la Fundación Incyde del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Industria y Navegación o la plataforma de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). 

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¿Qué hacer si el proyecto tiene un alcance internacional?

¿Cómo se elabora un plan de empresa con proyección internacional? Más del 80% de los exportadores europeos son pequeñas y medianas empresas, según datos del Parlamento Europeo y, en España, uno de cada cuatro negocios emprendedores factura fuera de las fronteras españolas, tal y como señala el Global Entrepreneurship Monitor España 2019-2020. Por tanto, es muy posible que la comercialización internacional esté dentro de tus objetivos a corto o largo plazo. 

En ese caso, la estructura del plan de empresa es igual que la expuesta con anterioridad, aunque es preciso que incluyas dentro de cada apartado este enfoque internacional. Además, hay que tener en cuenta las diferencias culturales y lingüísticas de los países en los que se quiere expandir la compañía para evitar confusiones. Por todo esto, se deben preparar diferentes versiones del plan de la empresa en los idiomas de cada zona en la que se operará. De ahí la importancia de hablar lenguas extranjeras, como el inglés, para abrir el mayor número de posibilidades en el mercado global.

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